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| Intensa labor de México para promover la cooperación en materia de seguridad en la OEA. La Secretaria Patricia Espinosa formuló un llamado a fortalecer la Carta Democrática Interamericana |
En el marco del 41° periodo ordinario de sesiones de la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), la Secretaria de Relaciones Exteriores, Embajadora Patricia Espinosa Cantellano, saludó el regreso y la presencia de Honduras en el foro hemisférico y expresó el interés de nuestro país en que esa hermana República se reintegre cuanto antes a todos los foros regionales y multilaterales.
Al intervenir hoy ante la Asamblea General de la OEA, en San Salvador, la Canciller afirmó que la delincuencia organizada es uno de los más grandes desafíos que enfrenta nuestra región y constituye una amenaza a nuestra vida democrática y a las libertades ciudadanas, que debemos enfrentar con toda determinación.
Declaró que las amenazas a la seguridad regional deben enfrentarse de manera conjunta para garantizar la seguridad que requieren nuestras sociedades.
Es un reto formidable: “enfrentamos un adversario ubicado dentro de nuestros propios territorios, que ha construido redes a través de las fronteras de todo el continente y que dispone de inmensos recursos económicos”. Indiscutiblemente, ello demanda fortalecer la cooperación internacional en materia de seguridad pública.
La Canciller señaló que debemos perseverar en la lucha por derrotar a las mafias criminales y luchar en contra de la impunidad, para cerrar los espacios al delito.
“No obstante, hay voces que promueven falsas soluciones o abogan por arreglos con los narcotraficantes. No nos engañemos: no hay más solución que aplicar la ley. Claudicar y legalizar las drogas no es una opción”, afirmó.
Se refirió a los cinco ejes de la Estrategia de Seguridad del Gobierno Federal: los operativos conjuntos de las Fuerzas Armadas y la Policía Federal, el fortalecimiento y depuración de los cuerpos policiacos, la reforma del marco legal e institucional, inclusive la reciente promulgación de la Ley de Migración, la política activa de prevención del delito, y la necesidad de fortalecer la cooperación internacional.
Recordó que en la reciente Conferencia Internacional para el Control de las Drogas celebrada en Cancún, se reafirmó la necesidad de realizar esfuerzos adicionales de coordinación internacional para disminuir el tráfico y el consumo de estupefacientes, a partir de los principios de corresponsabilidad y respeto a la soberanía.
Ante el foro hemisférico, subrayo que debemos seguir construyendo las instituciones que permitan a los gobiernos cumplir las demandas de seguridad, desarrollo y justicia y la plena realización de los derechos de la persona que exige toda ciudadanía moderna.
Agrego que recuperar las condiciones de seguridad es una responsabilidad fundamental que debe emprenderse sobre la base de los principios y valores democráticos y con pleno respeto de los derechos humanos.
Hizo un llamado a fortalecer la Carta Democrática Interamericana, sobre todo en sus capacidades de prevención de rupturas del orden interno y de apoyo para la consolidación democrática e institucional.
La seguridad, concluyó la Secretaria Espinosa, es a la vez “precondición y consecuencia del desarrollo; por ello, construirla y consolidarla es una responsabilidad fundamental del Estado y una tarea que debe emprenderse con el concurso de sociedad y gobierno”.
La Asamblea General de la OEA aprobó la Declaración de San Salvador sobre seguridad ciudadana en las Américas, que establece la prioridad de continuar dirigiendo esfuerzos para fortalecer la seguridad ciudadana, como un ámbito de la seguridad pública en los países del hemisferio.
La Declaración reconoce la importancia de fortalecer la cooperación bilateral, subregional, regional e internacional en materia de seguridad pública.
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